El ex jugador de Arizona State le ha demostrado a sus coaches, compañeros y todos los que han podido ver los entrenamientos que tiene ganas de comerse el mundo, de demostrar todo su potencial en el emparrillado y ser parte fundamental en el éxito del equipo la siguiente temporada.
Durante los entrenamientos ha realizado muy bien sus rutas y mostrado la seguridad que tiene en sus manos, incluso su atletismo a la hora de atrapar los pases que parecían muy complicados, como el que realizó ante la cobertura de su compañero Jimmie Ward, al que le ganó el salto y se adelantó a una posible intercepción.
Ward declaró que Aiyuk "está teniendo el mejor campamento sobre todos los del equipo, ofensiva y defensiva", y añadió que el receptor abierto "está llevando su juego a otro nivel. Es una locura. No gané ni una repetición uno contra uno frente a él".
El pick 25 del Draft 2020 ha mejorado sus cualidades como receptor en cada año que ha estado con los Niners. En la campaña pasada llegó a 826 yardas, superando las 748 de su temporada como novato; además aumentó su promedio de yardas por recepción (de 12.5 a 14.8) y su porcentaje de recepciones (de 62.5% a 66.7%).
Sin embargo, delante de él tiene a Deebo Samuel y a un experimentado George Kittle, quienes han sido las primeras opciones de los quarterbacks, pero con lo que ha demostrado durante los entrenamientos, será importante que se consolide como una de las armas principales del equipo, para quitar presión sobre el resto del cuerpo de receptores y abrir más oportunidades a la ofensiva.
Trey Lance lo Beneficiaría.
Tener a un mariscal de campo con buen brazo como el de Lance, quien ya demostró que es capaz de lanzar pases de más de 70 yardas, le hará mucho bien a Aiyuk, pues podrá demostrar su valía en las jugadas grandes, sobre todo en zona roja. Está demostrando que no importa si el pase va al cuerpo, a las manos, delante de él o retrasado, incluso si está demasiado alto, hará lo posible por rescatarlo y sumar yardas para los Niners.
Sí, los de confianza seguirán siendo Samuel y Kittle, pero Aiyuk se puede ir ganando su lugar como el objetivo para la jugada grande, la que gane partidos, aquella jugada que se robe los reflectores, tal como lo está haciendo en los entrenamientos.
Considero que, de mantener este nivel, podría ser objetivo en más jugadas, mejorar sus números y ser una sorpresa mayor en el ataque de San Francisco, pero la constancia que actualmente ha demostrado debe permanecer intacta en cada juego, aunque no sea el receptor principal, pues ese rol seguirá siendo de Samuel.
Pero no cabe duda de que los 49ers están reforzando su ofensiva, mejorando la calidad que ya tenía y gracias al esfuerzo de cada integrante del equipo. Habrá que ver el accionar del primer equipo durante la pretemporada, la cual arranca el 12 de agosto frente a los Green Bay Packers, después seguirán los Minnesota Vikings (20 de agosto) y los Houston Texans (25 de agosto).
