Fue una simple pregunta de entrenador a jugador, "Puedes jugar centro en la NFL?"
David Baas no lo pensó dos veces.
Es un competidor, con confianza sobre sus cualidades, y nunca se ha cuestionado su habilidad. Así que al volver al campamento de entrenamiento, cuando el centro titular Eric Heitmann cayó lesionado con una fractura de clavícula, y el entrenador en jefe de los 49ers Mike Singletary le preguntó a Baas esa simple pregunta, Baas no dudó.
"Sí, puedo hacerlo", dijo a su entrenador. "No hay problema".
Y eso fue todo. Baas, quien en cinco temporadas con los 49ers ha iniciado 38 juegos en la posición de guardia, cambió su enfoque al centro.
Sabía que no sería fácil, "pero esta es la NFL", pensó, "nada lo es".
Así que se puso a trabajar.
Pronto se volvió una visión común después de cada práctica del campamento de entrenamiento, que Baas y el quarterback Alex Smith eran los últimos en el campo de prácticas trabajando en los centros de Baas. Hay que admitir, no fue fácil al principio.
Baas había jugado como centro por sólamente nueve juegos previamente, durante su temporada como veterano en la Universidad de Michigan, pero la mejoría vino rápidamente.
Smith y el grupo de entrenadores elogiaron repetidamente la dedicación y desarrollo de Baas a través de la pretemporada, así que cuando la temporada regular llegó, Baas estaba tan preparado como podía estar.
Aún así, dijo que no estaba en el punto que él deseaba cuando la Semana 1 llegó. Hay muchas cosas relacionadas con jugar en la posición de centro, y esas cosas no ocurrían tan naturamente cuando se aproximaba a la línea de golpeo.
Estaba pensando mucho sobre cómo centrar el balón. Aún se estaba acostumbrando a llamar las protecciones a realizar.
"Definitivamente tienes más responsabilidades", dijo Baas. "Puedes ponerle todo el tiempo que quieras, puedes estudiar todos los videos que haya, pero nadie es perfecto".
"Tuve momentos en los que batallé, especialmente al principio".
Y uno de esos momentos vino en la Semana 2. Era el juego de Football de Lunes por la Noche ante los New Orleans Saints, y tras recibir la patada inicial, los 49ers enfrentaban una tercera oportunidad y cinco desde su propia yarda 15.
Los Saints estaban mostrando carga todo el camino. Y tan pronto como Baas soltó el balón, lo quiso de regreso.
"Ese simplemente se quedó conmigo", dijo Baas posteriormente.
En ese momento, habría sido fácil rendirse para el jugador de 6-pies-4 con 333 libras. Pero no lo hizo. Para Baas, esa no era una opción.
"Mis compañeros me dijeron que me olvidara de ello y continuara adelante, pero no habrían necesitado decirlo, pues ya lo había hecho", dijo. "Había cometido un error, pero eso quedaba en el pasado. No había nada que pudiera hacer para cambiarlo, y sabía que no permitiría que eso me afectara el resto de la noche".
Baas no sólo evitaría que eso le afectara esa noche, dijo que ese fue el punto de quiebra para él en esta temporada. Sabía que su más grande error había quedado atrás, y que no había otra cosa posible mas que mejorar.
Y eso es exactamente lo que ha hecho.
Ahora cuando Baas camina hacia la línea, no está preocupado sobre centrar el balón. Está jugando como un verdadero centro. Está diagnosticando la defensiva, viendo de donde viene la presión, y haciendo los ajustes apropiados sobre la línea.
Los detalles sobre la posición se han convertido en algo natural.
"Mi confianza se ha elevado y todo está fluyendo naturalmente".
Y tan bien como ha estado jugando en el campo, la mayor alegría de Baas en el 2010 vino de fuera.
Días antes de que el equipo partiera a su viaje a Carolina y Londres, Baas y su esposa Elizabeth tuvieron a su segundo hijo, Tate.
"Tener otro hijo", dijo Baas, "no puedes poner ese sentimiento en palabras".
Así que fue duro cuando tuvo quedejar a su recién nacido por 11 días, pero eso es parte de su trabajo, dijo. Con todo lo que Baas quería estar en casa con su esposa e hijos, tenía un trabajo que hacer, y lo hizo bien.
En Londres, Baas lideró una línea ofensiva que no permitió capturas a los Denver Broncos y abrió huecos para que Frank Gore corriera para 118 yardas.
Baas ha mejorado cada semana en el trabajo, y el martes, Singletary dijo que el juego de su nuevo centro era "excepcional".
"Pienso que no sólo dio el paso para cumplir con el trabajo, sino que está teniendo grandes actuaciones", dijo el entrenador en jefe.
Así que ahora cuando la gente habla sobre David Baas, nadie está preguntando si puede jugar centro en la NFL.